La noticia más importante de lo que va de 2018 en el ámbito de la tecnología es el descubrimiento de las vulnerabilidades Meltdown y Spectre en prácticamente todos los procesadores Intel. La compañía, junto a otras, ya están trabajando en solucionarlos, pero eso no ha evitado que los demandaran tres veces en Estados Unidos.
Meltdown y Spectre afectan a todos los procesadores de Intel que hayan sido fabricados en los últimos 20 años, además de a los procesadores x86 de otras compañías. No solo eso, el estudio que descubrió las vulnerabilidades aseguró que solucionarlas afectaría el rendimiento de todos los procesadores entre un 5% y un 30%.
Es por esto que en Estados Unidos han iniciado tres demandas contra Intel: una en el tribunal del distrito del norte de California, otra en el distrito de Oregón y otra en el distrito del sur de Indiana. Todas las demandas, como mencionan nuestros compañeros de Estados Unidos, acusan a Intel de tres cosas: fallar en proteger la seguridad de sus usuarios, fallar en revelar la existencia de las vulnerabilidades a tiempo y, por último, ralentizar sus procesadores mediante las actualizaciones de seguridad necesarias.
Intel, por su parte, aseguró que los parches de seguridad que ya han comenzado a liberar para proteger a sus procesadores de Meltdown y Spectre en realidad no perjudican tanto al rendimiento. Google, que también está trabajando en proteger sus servidores, afirma que “el impacto en el rendimiento después de actualizar es insignificante”.
Más allá de las demandas y los problemas legales que este gigantesco fallo de seguridad suponga para Intel o cualquier otra compañía, es recomendable que todos los usuarios de dispositivos con procesadores x86, ya sean ordenadores, móviles o tablets, sigan los pasos necesarios para protegerse del fallo y actualicen sus sistemas operativos y drivers inmediatamente un parche esté disponible.
Fuente : Gizmodo
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